lunes, 27 de octubre de 2014

Semana Nacional de Educación Financiera 2014

Del 20 al 26 de octubre, se realizó la séptima edición de la Semana Nacional de Educación Financiera en el país. El evento fue inaugurado por el Secretario de Hacienda, Dr. Luis Videgaray Caso, en la explanada del Museo Tecnológico de la Comisión Federal de Electricidad en la Ciudad de México.


Durante estos días, se llevaron a cabo más de mil trescientas actividades para fomentar la cultura financiera entre la población. Se involucraron a 51 instituciones públicas, privadas y educativas, y entre ellas, por supuesto, a la Universidad Autónoma de San Luis Potosí; en particular, a un costado de la Facultad de Economía, se ubicó un aula móvil para que acudieran los jóvenes, quienes se encuentran estudiando la Licenciatura en Economía, o la Lic. de Comercio y Negocios Internacionales.

Esta edición 2014 de la Semana Nacional de Educación Financiera buscó el propósito por difundir, entre la gente, temáticas como: el ahorro, la inversión, los seguros, los créditos, los presupuestos y los retiros. En este espacio, se destacará a la primera variable de la lista, y se iniciará con la pregunta: ¿por qué ahorrar?

La respuesta dependerá de la identificación del ente económico quien lo realiza; es decir, si provino de un individuo, familia, empresario, u organización. Se hará énfasis en los dos primeros. Y hay varias razones que justifican esta actividad de no gastar todo el ingreso que se percibe, mantenerlo “estático” y aguantar el costo de oportunidad por no utilizarlo. Algunas causas que lo motivan son:

a) No es posible definir cuándo se presentarán situaciones de riesgo, emergencias o catástrofes, y hay que estar preparados. 

b) En algunas ocasiones, se tendrán rachas positivas en el trabajo que se reflejarán en la obtención de ingresos extraordinarios, o por otras circunstancias, se podrán ganar recursos económicos en abundancia; sin embargo, el otro extremo es que se pierda el trabajo o suceda una reducción –esperada o no- en los flujos que se perciben. Este escenario refleja una situación de vaivén (fluctuación) durante la trayectoria laboral. O que decir cuando alguien queda desempleado, y se interrumpe la entrada de un dinero seguro.

c) Disponer de un “colchón” permitirá aprovechar las “jugosas” oportunidades de inversión para “hacer dinero”.

d) ¿Qué sucederá si lo invitan a un festejo social y/o religioso (padrino)?

e) Hay que ahorrar para disfrutar de un nivel de vida cómodo durante la vejez cuando uno se retiró de la vida laboral, o enfrentar el lamentable hecho de una discapacidad.

f) Ser un modelo a seguir para los hijos o la familia en esta práctica.


g) Y para finalizar, enfrentar la necesidad por adquirir un bien duradero (automóvil; refrigerador; casa; lavadora; televisor, etc.)

lunes, 20 de octubre de 2014

Jean Tirole y la regulación de los mercados


Jean Tirole (francés) ganó el premio Nobel en Economía 2014. Sus investigaciones se enfocan al estudio de los mercados imperfectos. Y estos tópicos se trabajan en la llamada “organización industrial” (rama de la ciencia económica).


Considere que necesita surtir la despensa, entonces, hay que trasladarse a los puntos de ventas (Mercado Hidalgo; Mercado República; Mercado Tangamanga; Mercado Revolución; las tiendas de autoservicio; las tiendas de conveniencia; mercados móviles; “las tienditas de la esquina”, etc.), buscar lo que se requiere y evaluar algunos criterios, para decidir qué llevar al hogar, como los siguientes: observar los precios –compararlos-; identificarlas promociones (descuentos);indagar sobre la calidad de los productos; si se tienen o no (disponibilidad), y la variedad que maneja el oferente (se reitera, solamente se están citando algunos aspectos para el análisis).A final de cuentas, todo cliente persigue el “sueño” de lo “bueno, bonito y barato” en los bienes y servicios; además, tomar en cuenta la cantidad de dinero con el que se acude para hacer las compras.

El escenario del párrafo anterior, describe al mercado como el lugar geográfico donde se encuentran para negociar una operación comercial (compra-venta) dos interesados o partes. Por un lado, los consumidores, y por el otro, los oferentes. “Cara a cara” se ponen de acuerdo en los términos de la transacción, es decir, el precio –principalmente-, la cantidad que se adquiere, entre otros rubros.

Hoy en día, la definición sobre el mercado tiene que comprender no solamente el lugar geográfico, sino incorporar la creciente aceptación por llevar a cabo transacciones a través del uso de la red. Por lo tanto, ya no es necesario que se junten físicamente para platicar los clientes y los oferentes, basta que entablen una comunicación a través de los dispositivos móviles o computadora, y que cuenten con acceso al servicio de Internet. Así que, mercado se vuelve el espacio (geográfico o virtual) donde se intercambian bienes y servicios a un precio establecido.

Los clientes quieren pagar lo menos posible; contrariamente, los vendedores buscan los valores monetarios más altos. En esta “lucha” de intereses, las condiciones de la oferta y la demanda (interacción) serán las que definan las cotizaciones y se espera que se establezca lo justo. Sin embargo, esta situación de “justicia” se pierde en la medida que el número de oferentes tiende a ser menor, y el extremo es el único productor (monopolio); ya que, no hay más opciones y si no se consigue con él, ¿con quién más? Por lo tanto, hay que fomentar la competencia para que los consumidores cuenten con más alternativas para obtener lo que necesitan.  


Jean Tirole, en una de sus declaraciones, afirmó que se procura impulsar la competencia entre los mercados. Pero se tienen que vigilar a través de la normatividad porque no sirve de nada de que se dispongan de más oferentes, si éstos se ponen de acuerdo en cuanto a qué precio vender, se reparten los territorios de venta, o llevan prácticas para afectar a los clientes y conseguir ganancias más allá de lo “justo”. Tirole –economista- ha dedicado su vida profesional para proporcionar un marco teórico que sirva de análisis para la regulación de esos mercados no perfectos.

lunes, 13 de octubre de 2014

Premio Nobel de Economía y las opciones de inversión.


Este lunes 13 de octubre a las 13:00 horas (tiempo local de Europa), se anunciará al ganador o ganadores del Premio Nobel en Economía 2014. Este galardón se comenzó a entregar a partir de 1969 por parte del Comité responsable, y los primeros en recibirlo fueron Ragnar Frisch (noruego) y Jan Tinberger (holandés). El mérito que les permitió alcanzar ese premio fue por haber desarrollado modelos dinámicos para el análisis de los procesos económicos -¡temática complicada!-; pero, para que se pueda entender y a grandes rasgos, consiste en la utilización y aplicación de las matemáticas al estudio de las trayectorias en el tiempo de variables que se relacionan con la ciencia de la escasez (el eterno problema que siempre será la razón de existencia de la economía, que es satisfacer las necesidades ilimitadas de las personas dados los recursos limitados que se tienen).

El año pasado (2013), los premiados fueron Eugene F. Fama, Lars Peter Hansen y Robert J. Shiller (los tres de nacionalidad norteamericana). Obtuvieron el prestigiado reconocimiento por sus trabajos empíricos en el estudio de los precios de los activos.

Para tener un “norte” sobre el tópico del párrafo anterior, imagine a una persona quien desea invertir sus ahorros –si tiene esa capacidad- en la Bolsa Mexicana de Valores (las oficinas de este centro bursátil se encuentran en el Distrito Federal), por lo que tiene que acudir al mercado –como todo consumidor- y buscar lo que más le agrade para comprarlo. En este caso, le interesará adquirir un “bien” para que en el futuro, le proporcione un dinero extra sobre el monto que utilizó para hacerse dueño de ese “objeto”. En otras palabras, el clásico ejemplo es comprar dólares “baratos” este día, esperar que el tiempo haga su labor; para que mañana, se vendan a un precio más caro y haber obtenido un beneficio ¡sin haber hecho nada!, (ejemplificando: si la divisa se cotiza en trece pesos, y se espera un incremento a quince pesos para finales del año, se tendría un rendimiento por pieza de dos pesos).

De la situación anterior, se identifica que el activo es la propiedad (bien, objeto, dólar) en manos de cualquier agente económico. Y se le asocia un valor o precio. La clave es descubrir la “mina de oro” para saber qué cotizaciones tenderán a subir con el paso del tiempo, con la intención de comprar barato hoy, y vender caro mañana. ¡Este es el problema! No se trata de tener una bola mágica para adivinar el futuro o ser un “Nostradamus” para pronosticar qué sucederá, ¡no! También, hay que ser conscientes de que no existe la herramienta o la metodología perfecta que será exacta. Inclusive, hay asesores en el área financiera que cuentan como anécdota que siempre se desea estimar con base en modelos complejos que no son fáciles de digerir por el ciudadano de “a pie”, y que lo mejor siempre será la sencillez; es decir, si no se quiere fallar, hay que tomar el dato inmediato anterior y afirmar –confiar- que ese valor se volverá a repetir. Otros calculan los datos utilizando una mezcla de métodos, y obtienen un promedio.

Sin duda alguna, recetas habrá muchas. También es necesario advertir que no se están considerando otros factores que pueden afectar lo que se está describiendo (ejemplo: política monetaria en México y en Estados Unidos; expectativas; diferencial entre las tasas de interés en el país y el vecino del norte; el riesgo país, y la lista continua).  Fama, Hansen y Shiller dedicaron tiempo y esfuerzo para estudiar el fenómeno de los precios de los activos, con la intención de ofrecer bases a partir de las cuales, se tengan conocimientos más precisos sobre su variabilidad a través del tiempo. Múltiples pruebas o experimentos  son las cartas de presentación de sus argumentos (trabajos empíricos).

Habrá que esperar que inspiración, implicará el anuncio del premio Nobel de Economía la próxima semana, ¡veremos!


lunes, 6 de octubre de 2014

Otra oportunidad para la productividad y la competitividad en México

El Presidente de la República entregó a la Cámara de Diputados, para su análisis, la iniciativa denominada “Ley para Impulsar el Incremento Sostenido de la Productividad y Competitividad de la Economía Nacional”. Este documento hace énfasis sobre las políticas públicas para fomentar ambas variables, las cuales son fundamentales para el crecimiento y el desarrollo de toda economía, y en consecuencia, para el bienestar de la población.

Durante la presentación de la propuesta a través de una conferencia de prensa, encabezada por el Secretario de Hacienda, el Secretario de Economía y el Presidente de la Comisión de Competitividad de la Cámara de Diputados, advierten sobre los retos que se tienen que enfrentar en el país y que son las razones de ser de la iniciativa (la lista que se describe a continuación –obviamente- no agota las preocupaciones nacionales):

a) La baja productividad.
b) La pérdida en competitividad. En este inciso, el referente es el reciente reporte que elaboró el Foro Económico Mundial; llama la atención que México bajó seis posiciones en la Escala Global de Competitividad 2014-15
c) Los altos niveles del comercio informal. En la conferencia de prensa, se comentó que los lineamientos para disminuir esta problemática y contenidos en Ley que es el tema de esta entrega, se complementarán con la estrategia de “Crezcamos Juntos” (esta última  se anunció a principios de septiembre del año en curso).
d) El rezago en el poder adquisitivo de la población. Recordar el debate sobre el incremento en el monto del salario mínimo que inició el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, y habrá que estar al pendiente sobre cómo terminará este asunto para finales de este año.
e) Los niveles de pobreza. A propósito de la desigualdad económica que existe en el país, apareció un comunicado de Meath-X y UBS que señalan que el número de mexicanos con fortunas superiores a los mil millones de dólares, pasó de veintidós a veintisiete, ¡hay más millonarios! Ciertamente, no fue un incremento significativo si se compara con el total de la población (más de 112 millones), según el Censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) del 2010. Sin embargo, persiste la situación de que unos cuantos acumulan riquezas, en contraste, muchos tienen poco.
f) La falta de financiamiento. Importante volver a reiterar que la principal fuente de préstamo para los empresarios son sus proveedores, y la escasa educación financiera de la gente.
g) No aprovechar la oportunidad histórica que se está viviendo en la nación en relación con el llamado bono demográfico. Esta condición significa que en los próximos años, la población en edad para incorporarse al mercado laboral alcanzará su máximo nivel, en consecuencia, se contará con el ejército de trabajadores más grande; posteriormente, tenderá a la baja y su lugar será ocupado por la población de la tercera edad.


Por lo tanto, hay serias problemáticas que la iniciativa en comento enfrentará. Así que, buscará:

i) Alentar los esfuerzos de trabajo en equipo entre el Estado y la iniciativa privada.
ii) Que el Comité Nacional de Productividad –creado en mayo de 2013- ocupe una posición significativa y protagonista en la operatividad de la propuesta en referencia.
iii) Que se tenga una verdadera política de Estado en fomento de la productividad.
iv) Que las micro, pequeña y medianas empresas se incorporen a las cadenas productivas.
v) Revertir el crecimiento sostenido de las importaciones.
vi) Contemplar un horizonte de planeación a veinte años; respetando los retos y necesidades que enfrentarán las futuras administraciones federales durante este periodo.
vii) Disponer de instrumentos que brinden certeza en relación con los objetivos, estrategias y acciones de la Ley.
viii) Hablar en términos de una política de fomento económico (integral), y no limitarse a una industrial –de corto alcance o enfoque-.
ix) Invertir en capital humano, ciencia y tecnología.
x) Establecer mecanismos de seguimiento para una continua evaluación y rendición de cuentas.
xi) Las áreas estratégicas serán el sector primario y el turismo.

En alguna ocasión, un representante de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), dijo –palabras más o menos- que las economías latinoamericanas se caracterizan –abusan- de los documentos rectores (planes, programas, escritos, propuestas, etc.) en su planeación. ¡Esperemos que no sea el caso!